El dólar la semana pasada tuvo una semana de fortalecimiento global motivado por los buenos datos de empleo en EEUU y la aprobación del techo de la deuda. El tipo de cambio del Sol también escaló algo, partiendo el lunes pasado en 3.677 y cerrando el viernes en 3.685.
Y es que el viernes se conoció que EEUU añadió 339,000 empleos (vs. 195,000 estimados), con al parecer una vuelta al mercado laboral de los empleados entre 45 y 55 años (fruto de la subida de los precios de los últimos meses??). La lectura inmediata es si afectará a las expectativas de subida de tasa, y lo cierto es que la mirada es mixta. Solo nos queda esperar a las reuniones de la Fed que sucederán la semana próxima.
Por el lado del techo de Deuda, el acuerdo entre Biden y McCarthy sosegó los ánimos sin contentar a los sectores más radicales (como era de esperar).
Por otro lado, la OPEP+ (Organización de Países Exportadores de Petróleo) consolidó los recortes de producción ya aplicados sin que el precio del Brent se haya visto catapultado hasta ahora.
Así que semana sin grandes noticias macro esperadas, por lo que de no suceder nada esperamos cierta lateralidad en el tipo de cambio, al igual que lo sucedido en las semanas previas.